martes, 17 de marzo de 2009

Infamia + Sand + Evernigth



Noche de Heavy metal en la sala Ozono de Zaragoza el 14 de marzo. Un cartel más que interesante con tres bandas noveles que presentaban su primer disco. Es Zaragoza una ciudad en la que se ha ido asentando un circuito de pequeñas salas y locales donde la movida underground está encontrando su hueco. Si tienes un grupo y quieres dar un concierto, Zaragoza es tu ciudad.

A las tardías 11 de la noche rompían el silencio Infamia, presentando su primer disco “Sueño o Realidad”, que pretenden mover por toda España. Esta banda de Logroño apuestan por el Heavy Metal de toda la vida, sin complejos

Fueron descargando temas como “Tiempos de dolor”, en los que se adentraban en los terrenos de la épica y los coros a lo Blind Guardian, “Flor de Hiel” o “Llanto de un adiós”. Su directo está basado en los potentes riffs de sus guitarras Mario y Karamo. Decíamos que su música apostaba por el Heavy clásico, sin embargo tiene un contrapunto en la voz de Alberto. Lejos de los registros estándar del género, su tono es gutural, mucho más cercano a influencias más modernas.

Cabe destacar la versión con la que cerraron su actuación, una trallera y gutural versión de Mónica Naranjo, “Sobreviviré”. Ver para creer.

Siguieron los valencianos Sand, también presentando su disco “Quién decide cómo”. Su estilo varía entre el Metal, el Rock, Funki... casi todo. Su apuesta no acabó de convencer en un ambiente puramente heavy, pero dejaron ganas y un directo llamativo. Temas que destacaron en su interpretación fueron “Dulce llanto”, “Tu último día” o “El perfume de su piel”. Mostraron potentes riffs y una batería contundente, además de una versatibilidad a prueba de bombas. No era el día propicio, pero el mestizaje que practican tiene su público.

Para acabar la noche, el Power Metal melódico de Evernight, que jugaban en casa. Los maños arrasaron desde un principio, moviendo al respetable (que a esas horas ya era de todo menos respetable) a un ritmo frenético con su tema “Ultimo adiós”, en el que martilleaban al unísono y a velocidad de vértigo guitarras, bajo y batería. Cabe destacar el preciosismo del teclado, tocado por Miguel Román, que adereza y sostiene la base rítmica del grupo.

Después de este comienzo, siguieron “Un mundo donde jugar”, “El mar de la esperanza” y “Tu guía”, además de una versión de Saratoga, la contundente “Vientos de Guerra”.

Eran las 2 de la mañana y acababa el concierto a esa hora en que la noche no ha hecho más que comenzar. La gente se fue con buen sabor de boca a continuar la fiesta por la noche zaragozana. Buen concierto.

Infamia: "Sueño o realidad"

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